Entre la ilustración y el diseño gráfico. Una mirada transversal

Frente a los artistas que frecuentemente plantean sus intervenciones en las carátulas de discos como una prolongación de su forma de hacer en el ámbito pictórico o gráfico, los diseñadores y diseñadoras poseen una óptica tal vez algo más pragmática, por cuanto son más permeables y proclives a responder adecuadamente a los múltiples condicionantes que conlleva cada proyecto que abordan. El cliente, la imagen que se quiere promover del producto discográfico, la comunicación con el público potencial al que va dirigido, además de las necesarias dosis de creatividad y originalidad que se espera de su trabajo, forman parte del día a día de este oficio cuya profesionalización ha corrido pareja al desarrollo de ámbitos como el de la publicidad, las marcas, las identidades corporativas, la industria editorial o el packaging. De hecho, no fue hasta la década de 1960 cuando se empezó a utilizar el término diseño gráfico de forma más o menos generalizada a nivel internacional y, por tanto, fue a partir de ese momento cuando asistimos a la consolidación de esta disciplina como profesión.

Tal y como pondremos de manifiesto en las próximas páginas, este hecho no es óbice para que un número importante de diseñadores y diseñadoras provengan de una formación en la que lo artístico posea un peso importante, siendo este un caso relativamente habitual entre las generaciones más tempranas. Justamente, será con el paso de tiempo cuando la preponderante figura del profesional formado en el ámbito de las bellas artes que redirige su trayectoria hacia el diseño vaya dejando espacio a la del profesional específicamente formado en este campo, sin que ninguna de ambas categorías tenga que ser considerada ni mejor ni excluyente. De hecho, bajo el amplio paraguas del diseño gráfico, en este epígrafe citaremos y comentaremos el trabajo de un número ingente de creadores y creadoras que han utilizado todo tipo de herramientas, algunas propias del diseño y otras más características de la creación artística. Todo ello con el fin de llamar nuestra atención sobre las carátulas en las que han intervenido y contribuir a intensificar nuestra relación con el producto musical al que acompañan.

Mikel Forcada fue el artífice de las portadas de los tres primeros discos del cantautor Mikel Laboa, con el que compartió amistad desde su época de estudiante. Gran dinamizador de la vida cultural vasca desde los años sesenta, Forcada fue miembro de la compañía de teatro de vanguardia Jarrai, en la que llevó a cabo trabajos de diseño, escenografía y dirección. El marcado expresionismo de la conocida portada de Azken (Goiztiri, 1964) [fig.32], los ecos del Estilo Tipografíco Internacional presentes en la concepción de Urtsuako kanta… (Goiztiri, 1964), así como el minimalismo gráfico de la carátula de Bertolt Brecht’en lau poema Mikel Laboa’ren abotsean (Goiztiri, 1969), son una muestra del eclecticismo y buen hacer de este creador en el campo del diseño discográfico.

Fig.32 – Mikel Forcada
Portada del disco de Mikel Laboa “Azken”, 1964
Goiztiri, 1964. © Elkar
Eresbil GA21/C-132

Fig.33 – Félix Garrido
Portada del disco epónimo “Peio/Pantxoa”, 1975
Edigsa / Herri Gogoa, 1975. © Elkar
Eresbil G11-6606

El donostiarra Félix Garrido (1942) es, sin lugar a dudas, un nombre de referencia en el diseño gráfico vasco de la segunda mitad del siglo XX. Conocido por sus numerosos carteles creados para eventos deportivos y culturales, entre los que destacan el Zinemaldia de Donostia o el Dantzari Eguna, también llevó a cabo una muy interesante producción como diseñador de carátulas de discos, área en la que demostró su excepcional talento y versatilidad. Proclive a la experimentación y al constante cambio de registro creativo, sus portadas nos conducen por el colorido mundo del pop art y la psicodelia, en ejemplos como los de la serie Akelarre Sorta (Edigsa/Herri Gogoa, 1973 y 1974), curiosísimo proyecto musical basado en canciones populares y tradicionales vascas, piezas que en su primer volumen fueron pasadas por el tamiz del funk y la música disco, o el ya citado disco epónimo de Lupe (Edigsa/ Herri Gogoa, 1974). Al mismo tiempo, la imagen de dibujo expresionista y colorido ácido utilizada en las portadas diseñadas para los discos epónimos de los bertsolaris Mattin, Xalbador y Kepa Enbeita (Edigsa/Herri Gogoa, 1974 y 1975) contrasta con el carácter fotográfico y sobrio de Eskutari (Edigsa/Herri Gogoa, 1972) de Oskarbi y Bertso zaharrak (Edigsa/Herri Gogoa, 1987) de Antton Valverde, Julen Lekuona y Xabier Lete, diseños estos últimos realizados con imágenes de Jorge de Oteiza. Su mundo visual en constante transformación se aprecia en la portada del disco epónimo de Pantxoa eta Peio (Edigsa/Herri Gogoa, 1975) [fig.33], cuyo rostro cantante realizado a base de recortables acaba teniendo una presencia casi escultórica, así como en la creada para Txirrita-ren bertsoak (Edigsa/Herri Gogoa, 1986) de Xabier Lete y Antton Valverde, imagen en la que, como si de un grabado se tratase, el color del fondo y el dibujo de líneas cruzadas componen el retrato José Manuel Lujanbio Retegi “Txirrita”. Estos y otros ejemplos dan fe de la calidad y variedad de un grafismo en el que predomina el trabajo artesanal y el empleo de técnicas variadas como el gouache o el collage.

La carátula del primer disco de Errobi (Elkar, 1975) [fig.34], grupo formado Anje Duhalde y Mixel Ducau, fue obra del dibujante de Iparralde Patrice Rouleau (1948-2019). Ejemplo de superación, Rouleau sufrió un accidente en el verano 1968 que le causó una tetraplejía, hecho que no le impidió seguir practicando el arte del dibujo y colaborar con publicaciones como la revista Xirrista y el diario Sud Ouest. En este último diario publicó semanalmente desde 1972 una tira cómica con su perro Kaïkou como protagonista. La mirada infantil que mantuvo en gran parte de su producción es apreciable en la estampa naíf y repleta de detalles de la portada de este disco, imagen en la que el río Nive (Errobi) recorre Iparralde hasta Baiona para desembocar en el Adour.

Fig.34 – Patrice Rouleau
Portada del disco epónimo “Errobi”, 1975
Elkar, 1975. © Elkar
Eresbil G11-5801

El versátil Josemari Alemán Amundarain (1948) ha dedicado su carrera profesional a campos tan variados como el de la decoración de interiores, la escenografía, la pintura, la ilustración o el diseño. En estos dos últimos se inscriben los dibujos creados para diferentes publicaciones del ámbito cultural e infantil, sus ilustraciones para El Diario Vasco, y también algunas carátulas de discos. Entre las más destacadas citaremos la correspondiente a Ongi egin duk mutil; Itsasoan preso (Elkar, 1977) de Aitor Badiola, cuya imagen marcadamente pop contrasta con las referencias al cómic y al grafiti presentes en Enbido (Elkar, 1997) del grupo Jokaldi.

Fig.35 – Antton Olariaga
Portada del disco recopilatorio “Xoxoa Osoa”, 1979
Autapen, 1979. © Elkar
Eresbil G11-1320

Probablemente, la faceta más popular de Antton Olariaga (1946) es la relacionada con la ilustración y el cómic. Zakilixut, personaje de la tira cómica publicada en el diario Egin desde 1976, sus colaboraciones en otros periódicos y revistas como Zeruko Argia, la irreverente Euskadi Sioux y el cómic Ipurbeltz, además de sus carteles, ilustraciones y portadas de libros publicados por las editoriales Gero y Erein, son solo una muestra de su vasto trabajo en estos campos. Sin embargo, en los años setenta y ochenta también diseñó las carátulas de varios discos que ponen de manifiesto su habilidad y variedad de recursos en este ámbito.

Mientras que Bizi Bizian (Xoxoa, 1978) del grupo Errobi es concebida como una depurada propuesta en la que combina el dibujo, la fotografía y una tipografía con reminiscencias art déco, Kanta dezagun (Ots, 1979) de Juan Carlos Urrutia y el recopilatorio Xoxoa Osoa (Autapen, 1979) [fig.35] fueron elaboradas con un planteamiento más pictórico. Asimismo, destacan las de las pertenecientes a XXI y XXII ediciones del Jazzaldia de Donostia (Kea, 1987 y 1988), portadas en las que se reproducen los carteles que Olariaga creó para el festival en 1986 y 1987 respectivamente.

Pese a su escasa producción en este campo, el inclasificable, rebelde, divertido y crítico universo visual de Juan Carlos Eguillor (1947-2011) merece una mención muy especial. Donostiarra de nacimiento y bilbaíno de adopción, abordó la creación desde múltiples ámbitos como la ilustración, el grabado, la pintura, la historieta o el vídeo. Fue colaborador de la revista Euskadi Sioux y periódicos de la talla de Diario 16 y El País, además del autor del primer cartel de la moderna Aste Nagusia bilbaína, pieza diseñada en 1978 y ejemplo de la fecunda imaginación de este poliédrico creador. En el frontal de la carátula de Hautsi da anphora (Autapen, 1980) de Ruper Ordorika [fig.36] el fotomontaje y el dibujo se funden para generar la imagen de un mundo abigarrado y gris, únicamente roto por la nerviosa y dinámica rotulación manuscrita a color.

Fig.36 – Juan Carlos Eguillor
Portada del disco de Ruper Ordorika “Hautsi da anphora”, 1980
Autapen, 1980. © Elkar
Eresbil G11-1730

Aunque frecuentemente la ilustración de los discos orientados a un público infantil es dejada de lado, en este ámbito destacan los trabajos de Jesús Lucas Erro (1946) que creó, entre otras, más de una veintena de carátulas para los cuentos grabados del histórico grupo de teatro Txotxongillo, fundado en 1971 por Enkarni Genua y Manolo Gómez, y cuyos discos fueron editados por Kea entre 1985 y 1996. También el ilustrador Jon Zabaleta (1950) es poseedor de una trayectoria fuertemente relacionada con la literatura destinada al mundo infantil y juvenil. Además de colaborar con editoriales de la talla de Elkar o Erein, ha diseñado las carátulas de Txano Gorritxo (Edigsa/Herri Gogoa, 1975) del grupo Xaribari, Eusko Abeslari Txikien Alkartasuna (Xoxoa, 1979), Xixupika 1 (Autapen, 1980), además de otros dirigidos a un público más adulto como Bihozkadak (Autapen, 1979) de Koska o Euskadi, jende gutxi (Esan Ozenki, 1993) de Les Mecaniciens. Trabajos coloristas que emanan originalidad, frescura y simpatía, al tiempo que demuestran su buen hacer como dibujante.

Fig.37 – Jokin Mitxelena
Portada del disco de Koldo Amestoy y Bixente Martínez “Behin Bazen”, 1992
© Elkar, 1992
Eresbil G21-01902

Gran parte del trabajo de Jokin Mitxelena Erize (1962) se centra en el campo de la ilustración de literatura infantil. No es de extrañar, por tanto, que sus dibujos sirvieran para ilustrar varios discos de cuentos narrados y musicalizados editados por Elkar, editorial con la que colabora como ilustrador de libros desde los años noventa. Sus carátulas para Behin Bazen (Elkar, 1992) de Koldo Ameztoy y Bixente Martínez [fig.37] y la más reciente Urrezko Giltza (Elkar, 2016) de Patxi Zubizarreta y Joserra Senperena poseen la viveza, la expresividad y la frescura derivadas del trabajo directo y manual, rasgos que combina con los toques de humor tan presentes en su obra.

El trabajo de Bittor Allende posee dos vertientes. La de su labor en solitario de comienzos de los años ochenta y la de las creaciones bajo el paraguas del estudio Paradox: Oficina General de Inventos, proyecto en el que a partir de mediados de los ochenta colaboraron Allende y Álvaro Gurrea, además de otros diseñadores. Suyos fueron algunos emblemáticos carteles de los primeros años de la Aste Nagusia bilbaína, de la Korrika o de AEK. Además, con Paradox llevó a cabo muchos proyectos como grafista, amén de numerosas campañas publicitarias para instituciones públicas y privadas, algunas de ellas no exentas de polémica.

Fig.38 – Bittor Allende
Portada del disco de Oskorri “Plazarik plaza”, 1980
Autapen, 1980. © Elkar
Eresbil G11-1189

En el campo del diseño de carátulas de discos fue especialmente significativa su colaboración en varios discos de Oskorri, como los titulados Plazarik plaza (Autapen, 1980) [fig.38], en el que Allende pone de manifiesto su habilidad como ilustrador y diseñador, o Adio Kattalina (Elkar, 1990), con fotografía de Pedro Zarrabeitia. Esta labor continuó con las propuestas que Paradox creó para emblemáticos discos de la banda como Katuen testamentua (Elkar, 1993), los dos volúmenes de Oskorri & The Pub ibiltaria (Elkar, 1997 y 1998), Iparragirre Bueltan etxera (Elkar, 1999), Ura (Elkar, 2000) y Vizcayatik… Bizkaiara (Elkar, 2001), entre otros. La innegable originalidad y calidad de estas y otras muchas carátulas deriva del uso de recursos que abarcan desde la ilustración al fotomontaje y son fruto de un trabajo concienzudo, meditado y frecuentemente artesanal.

José Javier Lacalle “Laka” (1952) comenzó su actividad artística en los años setenta y desde entonces ha desarrollado una prolífica producción en la que ha alternado la creación pura con la ilustración y el diseño. Autor de populares carteles, como el de la Aste Nagusia de Bilbao de 1979, y participante en diversas ediciones de los certámenes artísticos Gure Artea y Ertibil, ha diseñado logos, ilustrado revistas y creado algunas carátulas de discos. Gran parte de su producción destaca por cierto esquematismo, un potente uso del color, así como por su carácter optimista y singular. Las portadas de Hau dok umoria! (Kea, 1996) de Txatanuga Futz Band y de Aisterrazu da plaza. Bi (Kea, 2001) son dos muestras de su trabajo, el primero con cierto toque surrealista y el segundo mucho más experimental.

Fig.39 – José Félix Igartua
Portada del disco de Akelarre “7-90”, 1990
© Elkar, 1990
Eresbil G11-1551

Un acercamiento a la ingente producción como diseñador de José Félix Igartua (1948) pondría de manifiesto su difícil clasificación, pues solo sus trabajos para Elkar superan el centenar y se llevaron a cabo en un lapso temporal de varias décadas. De hecho, debemos diferenciar aquellas que, pese a estar diseñadas por él, poseen aportaciones fotográficas de colaboradores en su portada de otras en las que ejerció un control de todo el material creativo. Así, el planteamiento efectista, dramático y ciertamente afín al contenido de Zaurietatik dario (DPM, 1976), de Gontzal Mendibil eta Xeberri, y Nire aitaren etxea defendituko dut (DMP, 1976), de Fernado Unsain, dio paso en los años ochenta a un nutrido grupo de propuestas en las que la labor de diseño de Igartua quedaba frecuentemente eclipsada por las poéticas fotografías de Luis Antonio Escobedo, Ramón Serras o Sigfrido Koch.

Un ejemplo notable lo encontramos en su trabajo para …eremuko dunen atzetik dabil (Elkar, 1988) de Itoiz, con fotografías de Juan Luis Markaida. Como contraste, su vínculo con el mundo de la ilustración y la pintura se aprecia en otros ejemplos como las carátulas de la serie de discos infantiles Xixupika 2 (Elkar, 1984), Minutuz minutu (Elkar, 1985) y Gerlarik ez (Elkar, 1987) del grupo Guk, 7-90 (Elkar, 1990) de Akelarre [fig.39], Luk berri (Elkar, 1991) de Irigoien Anaiak o Basajaun (Elkar, 1991) de Zaldibobo.

La doble vertiente de artista autodidacta y diseñador de David Abajo Fernández (1955) se materializó en varias carátulas de discos editados a finales de los años setenta y comienzos de los ochenta. Aunque en la actualidad regenta un estudio de diseño en Bilbao centrado en campos como el de la imagen corporativa, el packaging o la publicidad, suyas son las carátulas de Fanfarre Xut (Autapen, 1979) y del mítico Alkolea (Elkar, 1982) de Itoiz [fig.40]. En ambas pone de manifiesto su destreza como dibujante y diseñador, apreciable sobre todo en la refinada portada de Alkolea en la que su pequeña acuarela sobre el elegante fondo negro, se transforma y manifiesta como una gran explosión de color.

Fig.40 – David Abajo
Portada del disco de Itoiz “Alkolea”, 1982
© Elkar, 1982.
Eresbil G11-1280

Asimismo, participó en el diseño del clásico Ezekiel (Autapen, 1980), cuya fotografía fue obra de Patxi Bilbao y la ilustración de la contraportada suya.

Fig.41 – José Ordorika
Portada del disco de Itoiz “Ambulance”, 1987
© Elkar, 1987
Eresbil G11-1303

El siempre sugestivo trabajo de José Ordorika (1962-2010) tuvo su reflejo en un amplio repertorio de proyectos ideados en diversos ámbitos. Su trabajo en el campo de la creación pura se aprecia en el galardón obtenido en el la tercera edición del Festival de Vídeo de San Sebastián (1984), así como en las exposiciones individuales Inventario (1993) y Sparrings (2001). También destacó en su faceta de ilustrador de portadas de libros, entre los que destacan Poemas & híbridos (1990) y El hijo del acordeonista (2004) de Bernardo Atxaga. Sin embargo, su relación con el mundo de la música, campo con el que la familia Ordorika ha tenido y tiene un estrecho vínculo, fue probablemente el que más popularidad le proporcionó, pues fue el autor de numerosas carátulas de discos publicados desde mediados de los años ochenta.

Destacan por su carácter altamente experimental, para el momento en el que fueron realizadas, las correspondientes a Bihotzerreak (Elkar, 1985), disco de su hermano Ruper Ordorika, y Ambulance (Elkar, 1987) de Itoiz [fig.41]. En ambos casos, José Ordorika crea imágenes muy sugestivas que nos transmiten la sensación de estar viendo la portada a través de una pantalla que tiende a modificar y distorsionar su contenido, característica que debemos relacionar con el fuerte vínculo que este artista tuvo con la videocreación en los años ochenta. Otras portadas diseñadas para algunos discos de su hermano Ruper, como Hurrengo goizean (Metak, 2001), Kantuok jartzen ditut (Metak, 2003) y Memoriaren mapan (Elkar, 2006), fueron concebidas en forma de retratos en los que este creador proyectó su naturaleza esteta. También merecen ser citadas otras carátulas basadas en algunas de sus creaciones y utilizadas a título póstumo. Tal es el caso de las del disco colectivo Lou Reed. Mila esker (Elkar, 2014) y de Revolta! (2014) del grupo Itziarren Semeak.

Es imposible hablar del ilustrador y diseñador Josepe Zuazo (1952-1992) sin referirse a su faceta de gran dinamizador cultural y festivo de Bilbao, así como a su intensa colaboración con el grupo Oskorri. Para ellos llevó a cabo inolvidables carátulas desde finales de los años ochenta hasta su prematuro fallecimiento a comienzos de los noventa. Su gusto por las puestas en escena teatrales, su sentido del humor, así como su fino instinto de diseñador, dieron como resultado trabajos en los que adquirió diferentes roles. En algunos, como Mosen Bernat Etxepare 1545 (Elkar, 1989), Hi ere dantzari (Elkar, 1991) o Badok hamahiru (Elkar, 1992), ejerció como ilustrador y diseñador, mientras que en otros cedió gran parte del protagonismo a las fotografías de Pedro Zarrabeitia y Mikel Alonso.

Fig.42 – Josepe Zuazo
Portada del disco epónimo “Oskorri”, 1991
© Elkar, 1991
Eresbil G11-1183

Tal es el caso de las divertidas portadas de Datorrena datorrela (Elkar, 1989), Hau hermosurie! (Elkar, 1990) e In fraganti (Elkar, 1990), así como la del epónimo Oskorri (Elkar, 1991) [fig.42], en la que una bella trikitixa con el nombre del grupo grabado, fotografiada por J.M. Orcajada, se convierte en un simple pero muy efectivo reclamo visual del disco.

Fig.43 – Josetxo Ezponda
Portada del disco de Los Bichos “Color Hits”, 1989
Oihuka, 1989. © Elkar
Eresbil G11-1849

El carismático Josetxo Ezponda (1963-2013) fue conocido por su faceta musical como miembro de la ecléctica banda de culto Los Bichos. Sin embargo, poseía un espíritu creativo que llevó a experimentar no solo con diversos estilos musicales, sino también a adentrarse en otros ámbitos como el del grafismo. Su querencia por el mundo de la imagen y el diseño la materializó en las carátulas de varios discos editados por el sello Oihuka desde finales de los años ochenta. El trabajo que realizó para Color Hits (Oihuka, 1989) de Los Bichos [fig.43] fue, con toda probabilidad, el que mejor refleja la naturaleza rupturista y ecléctica de este creador. Al igual que ocurría con su música, en esta y otras propuestas gráficas juega con una amalgama de influencias que abarcan desde el pop, la estética glam, un intencionado gusto kitsch y los colores propios de la psicodelia.

Todo ello al servicio de imágenes abigarradas y con un cromatismo extremo, que impactan en nuestra retina y la emborrachan generando un efecto casi hipnótico. Con un estilo similar, llevó a cabo varias carátulas para discos de otros sellos, como los titulados Más suicidios (1990) de Cerebros Exprimidos o el colectivo The Worst Around (1990), en el que participó y compartió protagonismo musical con otros tres grupos del momento como La Perrera, La Secta y Cancer Moon. Por contra, en sus trabajos para Tahúria (Oihuka, 1990) de Tahúres Zurdos, Los Bichos in Bitter Pink (Oihuka, 1991) de Los Bichos y Beldurrik ez (Oihuka, 1991) de Matraka, reduce sus recursos al uso de la fotografía en blanco y negro que combina con toques de color puntuales y con sus reconocibles rotulaciones manuscritas, obteniendo así portadas muy sugerentes que destacan por su extremada sencillez formal.

La doble formación de Rafa Serras Uría (1960) como diseñador y director de arte es uno de los factores que explica la variada producción de este creador, que abarca la ilustración de libros para editoriales de la categoría de Elhuyar y Elkar, el diseño de carteles, la animación, la escenografía, así como la dirección de arte en películas y series de televisión. Gran amante de la música, diseñó un número considerable de carátulas entre finales de los años ochenta y comienzos de los noventa; un heterogéneo y entretenido repertorio en el que camina por lenguajes y soluciones formales de lo más variado. De entre todas ellas, cabe citar la de Beti Gogor, beti mozkor (Elkar, 1989) de O.K. Korral, planteada como una especie de viñeta de novela gráfica, en la que aparecen múltiples referencias al boxeo y al alcohol que enlazan con el título del disco a la perfección.

Fig.44 – Rafa Serras
Portada del disco de Joselu Anayak “Laugarren dantza”, 1993
© Elkar, 1993
Eresbil G11-1365

En Dultzemeneoa (Elkar, 1990) de Tapia eta Leturia opta por el uso de la fotografía coloreada con la que consigue un marcado aire pop, mientras que en Marigaizto (Elkar, 1991) de Azala luce su faceta de ilustrador generando una imagen que posee reminiscencias psicodélicas. Mención aparte requieren el tratamiento futurista de Irtenbide bakarra (Esan Ozenki, 1993) de E.H. Sukarra, con su llamativa tipografía digital, así como el collage de Laugarren dantza (Elkar, 1993) de Joselu Anayak [fig.44], auténtica acrobacia visual en la que combina elementos como la imagen del corredor de la obra pictórica La derrota de Samotracia (1972) del Equipo Crónica, la rotulación manuscrita del título y la tipografía vasca empleada en el nombre y logo del grupo, entre otros muchos elementos.

Fig.45 – José Luis Lanzagorta y Susana Rico
Portada del disco de BAP! “Zuri beltzez: Bide huts eta etxe huts”, 1996
© Esan Ozenki, 1996
Eresbil G21-00531

El diseñador gráfico José Luis Lanzagorta (1958) posee una larga trayectoria profesional en la que el vínculo con el mundo de la cultura, y de la música en particular, ha sido una constante. Fundador del Estudio Lanzagorta en 1991 e integrante de grupos musicales como La Orquesta Mondragón y La Buena Vida, ha generado un incontable número de diseños que abarcan ámbitos como el del cartel, el editorial, el expositivo, la identidad visual (véase la del centro de cultura contemporánea Tabakalera de Donostia), así como trabajos de diversa índole para eventos de la relevancia del Jazzaldia y la Quincena Musical. Su primera portada para un disco la diseñó en 1993 para Mundo Moderno del grupo donostiarra Puskarra, del que era miembro.

Esta oda al movimiento de vanguardia De Stijl y a uno de sus principales representantes, Piet Mondrian, fue dejando paso a diseños cada vez más refinados, originales y meditados, como el epónimo Joserra Senperena (IZ, 1999) o Zuri beltzez: Bide huts eta etxe huts (Esan Ozenki, 1996) [fig.45] del grupo BAP!, trabajo que elaboró en colaboración con Susana Rico. Asimismo, bajo el paraguas del Estudio Lanzagorta ha diseñado un considerable número de carátulas de una extremada elegancia, que abarcan desde el toque contemporáneo y abstracto de The Komeda Project Live (Jazzle, 2003) de Dani Pérez, pasando por el minimalismo de 10 Trio piano, biolin eta akordeoirako (Gaztelupeko Hotsak, 2014) de Joserra Senperena, hasta llegar al revival cincuentero de A French Session (Gaztelupeko Hotsak, 2019) de Paul San Martín.

Las incursiones puntuales de los hermanos Mikel Urmeneta (1963) y Asisko Urmeneta (1965) en el campo del diseño de carátulas de discos también requieren una mención, dada la notoriedad de ambos en diferentes campos de la ilustración y del diseño. Mikel fue uno de los fundadores de la conocida empresa Kukuxumusu y gran parte de su producción la ha desarrollado en ámbitos como el del cartel, el muralismo, la publicidad o el arte. El sencillo diseño creado para la portada del disco Eunate (TX, 1998) del saxofonista y compositor Josetxo Goia-Aribe [fig.46] es una muestra del particular estilo naif de este creador.

Fig.46 – Mikel Urmeneta
Portada del disco de Josetxo GoiaAribe “Eunate”, 1998
© TX, 1998
Eresbil G21-00362

Algo más prolífico fue en este ámbito su hermano Asisko, cuya faceta de historietista se aprecia en las ilustraciones que llevó a cabo para el interior del mítico Borreroak baditu milaka aurpegi (Esan Ozenki, 1993) de Negu Gorriak. Asimismo, en los años noventa ilustró las portadas de varios discos publicados por los sellos Gor y Elkar, piezas en las que hace gala de un estilo fresco marcado por el gusto por el contraste, los toques expresionistas y cierta dosis de ingenuidad. Sobresalen sus trabajos para La Revoluzione della Tradizione (Gor, 1992) de Pottoka, Gauari deika (Elkar, 1994) del grupo Izugarri y el popular Marijane kanta zan! (Elkar, 1997) de Oskorri, creado en coautoría con Marko Armspach bajo el nombre de Kutxuflet.

El polifacético Iñaki Redín Eslava “Popi” (1964-2018) simultaneó durante muchos años su trabajo como docente con otras grandes pasiones como el cómic, el diseño gráfico y la música. En este último campo pudo colmar sus aspiraciones por dos vías, pues por un lado fue miembro de grupos como Los Dinosaurios, Eros o Skape y, por otro, también vio en el diseño de carátulas de discos otra manera de embarcarse en proyectos musicales. De su producción citaremos las creadas Apaiz gaztea (Gor, 1995) de Mikel Elizaga, en la que juega y experimenta con la obra pictórica de 1812 El caminante sobre el mar de nubes de Caspar David Friedrich, gran referente de la pintura romántica alemana, Nómadas (Gor, 1999) de Numidia, que emula a un tapiz textil, III (Gor, 2002) del grupo Asgarth, con una impronta metálica que se ajusta a la perfección al contenido musical del disco o Rastafari mamao (Gor, 2000) de Flitter, simpático proyecto que realizó junto a Elena Garín.

Fig.47 – Laura Esteve
Portada del disco de David Xirgu Quartet “Ugrix”, 1997

© Jazzle, 1997
Eresbil G21-09253

La búsqueda del dominio técnico fue una de las constantes en el trabajo de la diseñadora gráfica donostiarra Laura Esteve (1939). Formada en el ámbito de la pintura con Vicente Cobreros Uranga y Ascensio Martiarena, enfocó su carrera profesional hacia el diseño y, tras trabajar cinco años en agencia de publicidad ALAS Norte, abrió el Estudio TC de Comunicación junto a Maite Menchaca y Agustín Echenique. Sin embargo, las servidumbres del mundo publicitario comercial le llevaron a plantearse el diseño como una profesión con la que implicarse en proyectos de carácter cultural y social. Además de la práctica de la pintura, que nunca abandonó, su trabajo como diseñadora abarcó la creación de carteles, anuncios, folletos, la ilustración y el diseño de portadas de libros, así como la creación de carátulas de discos. Son significativas de su talento y versatilidad las creadas para Zorcicos, canzonettas, y tonadillas recogidos de la obra musical del que fue Señor Conde de Peñaflorida (Elkar, 1985), cuya mezcla de tradición y modernidad contrasta con el lenguaje urbano de XX Festival de Jazz de San Sebastián (Kea, 1986), en la que se reproduce el notable cartel del Jazzaldia de 1985, también diseñado por ella. Mención aparte requieren sus trabajos para la colección Zirrara del sello Jazzle. Tanto Ziklo 1 (Jazzle, 1994) de Gonzalo Tejada, como 13 solos (Jazzle, 1996) de Ángel Unzu, Ugrix (Jazzle, 1997) de David Xirgu Quartet [fig.47], Blu blow bat (Jazzle, 2000) de Jean Louis Hargous y el recopilatorio Plaza 99 (Jazzle, 2000), son aportaciones en las que genera un perfecto maridaje entre el arte de la pintura y el diseño, por medio de sugerentes imágenes abstractas.

Fig.48 – Joaquín Resano
Portada del disco de Leihotikan “Lur”, 2000
© Gor, 2000
Eresbil G21-02098

Aunque son muchos los creadores vinculados al mundo de la historieta que han diseñado carátulas de discos, citaremos a algunos de los más relevantes. El innegable talento de Joaquín Resano Aristu (1948) para la ilustración y el cómic se advierte desde sus trabajos de los años ochenta para la editorial Pamiela hasta sus colaboraciones en la revista El Víbora o la novela gráfica El Perro (2009), creada junto al también dibujante navarro Pedro Osés. Pese a no haber diseñado muchas carátulas, cabe citar algunos ejemplos notables como Lur (Gor, 2000) de Leihotikan [fig.48], en cuya portada se reproduce su obra Sitting Bull, y Herrimiña (TX, 2000) de Josetxo Goia-Aribe, piezas en las que evidencia su querencia por el arte pop y la estética del cómic.

El navarro Ernesto Murillo “Simónides” (1952), cofundador de TMEO y colaborador de revistas underground como Makoki o El Víbora, destaca por sus trabajos en los discos Y ahora que? (Soñua, 1983) de La Polla Records, Pottoka. Kiowak. SS-77 (Oihuka, 1990) de Julio Kageta, Carne para la picadora! (Gor, 1996) de La Polla Records, con diseño de Manolo Gil, 1988-2000 (Gaztelupeko Hotsak, 2000) de Ñaco Goñi y Malcolm Scarpa y el epónimo del grupo Tocamás (Gor, 2004). Todos ellos ponen de manifiesto no solo su habilidad como dibujante, sino también el inherente vínculo de su trayectoria profesional con el mundo del cómic. También el dibujante donostiarra Jokin Larrea (1959) fue colaborador de la revista de historietas TMEO y ejerció su trabajo como ilustrador en otros muchos ámbitos, como el publicitario y el editorial. En los diseños de sus portadas opta por un tipo de ilustración cercana a su labor como historietista, tal y como se percibe en el recopilatorio Oihuka 89 (Oihuka, 1989), ¡¡Échenle guindas!! (Gor, 1997) de Kojon Prieto y los Huajolotes y No hay agua (Gor, 1998) de Kaos Etílico. Otros ejemplos, fundamentalmente ligados a la banda Kojón Prieto y los Huajolotes y realizados junto a Manolo Gil, poseen cierto regusto kitsch derivado de la fusión de sus ilustraciones con la fotografía en color.

El trabajo del pamplonés Manolo Gil Gombau (1959) merece una mención especial, tanto por lo prolífico de su producción, como por la popularidad que alcanzaron muchos de los discos en los que colaboró como diseñador. Formado en la Escuela de Bellas Artes de Pamplona, su variedad de registros es tal que desistiremos en la tarea de realizar cualquier tipo de clasificación. Baste con decir que entre los años ochenta y comienzos de los dos mil diseñó más de un centenar de carátulas de discos para grupos tan relevantes en la escena musical vasca como Kortatu, La Polla Records, Negu Gorriak, Zarama, Berri Txarrak, Tijuana in Blue, Delirium Tremens, Soziedad Alkoholika o el ex Itoiz Juan Carlos Pérez. Consciente de la importancia de la portada como elemento clave en la venta del producto musical, concibe sus diseños como un todo que refleje de manera adecuada al grupo o solista. Por citar algún ejemplo concreto, destacaremos las portadas de algunos discos de Negu Gorriak como Borreroak baditu milaka aurpegi (Esan Ozenki, 1993) [fig.49] o Ideia zabaldu (Esan Ozenki, 1995). La primera hace gala de un reduccionismo extremo, pues el título y el logo de la banda, las dos hachas cruzadas que ya aparecían asociadas al grupo desde su disco epónimo de 1990, se erigen en los únicos elementos que destacan sobre el fondo negro.

Fig.49 – Manolo Gil
Portada del disco de Negu Gorriak “Borreroak baditu milaka aurpegi”, 1993
© Esan Ozenki, 1993
Eresbil G11-1368

Fig.50 – Manolo Gil
Portada del disco de Kortatu “A front line compilation”, 1989
Oihuka, 1989. © Elkar
Eresbil G11-1258

Por contraste, el mestizaje musical de Ideia Zabaldu, tiene su reflejo en la colorida figura del hombre que danza y porta una laya en su mano izquierda. También resulta muy interesante el regusto constructivista de A front line compilation (Oihuka, 1989) de Kortatu [fig.50], portada en la que inmortalizó a Maritxu Pagola, madre de Inaxio Asteasuinzarra, asesinado por los Gal en Baiona en 1985 y al que el grupo le dedica el décimo corte del disco titulado Hotel Monbar. El toque posmoderno de Bajo presión (Elkar, 1994) de La Polla Records y ¡No intente hacer esto en su casa! (Mil A Gritos Records, 1997) de Soziedad Alkolika, o las reminiscencias futuristas de Ikaro (Elkar, 2000) de Juan Carlos Pérez, con fotos de Aitor Ortiz, son solo una muestra de la enorme versatilidad de este creador que, además de las labores de diseño de carátulas, realizó los videoclips musicales de estos y otros muchos grupos.

Fig.51 – Txabi Oneka
Portada del disco epónimo “Kortatu”, 1985
Soñua, 1985. © Elkar
Eresbil G11-1252

El cofundador de Soñua Txabi Oneka llevó a cabo el diseño de algunas carátulas de discos memorables publicados por este sello pamplonés. De entre ellas cabe destacar las de Salve (Soñua, 1984) y Revolución (Soñua, 1985) de La Polla Records, cuyos impactantes dibujos de la portada fueron obra de Ñaco. También resulta especialmente significativo su trabajo en el disco epónimo de Kortatu (Soñua, 1985) [fig.51] en cuya portada emplea una fotografía del aizkolari León Huegún “Txikito de Aia” y con un no menos interesante interior en el que genera un gran collage que fusiona las letras manuscritas de las canciones con el cómic y con fotografías. Un año después también diseñaría para Kortatu la carátula de ¡A la calle! (Soñua, 1986), uno de sus últimos proyectos para Soñua, casa que se disolvió y permitió a Oneka volcarse en otros proyectos como la fundación del sello pamplonés Nola!.

Pese a que Ángel Katarain (1961) es más conocido en su faceta de técnico de sonido, no nos resistiremos a citar algunas de las escasas portadas que diseñó. Algunos de estos trabajos, en los que colaboró el fotógrafo Jon Amilibia, demuestran su querencia por las imágenes conceptuales y de impacto directo, como ocurre en las carátulas creadas para los discos Barkatu ama (Kea, 1989) y Gor (Kea, 1990), ambos de la banda de culto M-ak.

El humor gráfico, el cómic y la caricatura son solo algunos de los campos en los que se desenvuelve el ilustrador Iñaki Martiarena “Mattin” (1967). Con un estilo sencillo pero en constante evolución, entre sus influencias se hallan grandes creadores como el realista francés Honoré Daumier o el dibujante vasco del periodo de preguerra John Zabalo Ballarin “Txiki”. Además de sus trabajos para revistas, como Argia o Ipurbeltz, destacan las decenas de libros en los que ha participado en calidad de ilustrador y que han sido editados por Erein, Elkar, Ibaizabal, Pamiela o Txalaparta, entre otras. El carácter desenfadado, tierno, optimista y entrañable de gran parte de su trabajo en el campo editorial también se halla presente en las carátulas de los discos Txukalda (Gaztelupeko Hotsak, 2004) del grupo Morau ta Agotak, así como en el colectivo destinado al público infantil Gure mundo txikitik (Elkar, 2005).

Por otro lado, citaremos la escasa pero interesante producción en este campo de otros dibujantes como Patxi Huarte “Zaldieroa” (1969), cofundador del fanzine Napartheid, colaborador de TMEO, de los diarios Euskadunon Egunkaria y Berria, así como de múltiples revistas. Su curioso diseño para el disco colectivo Dekadencia. Mala Fama. Trauma. Ceda el vaso (Oihuka, 1992), creado en colaboración con Itziar Alforja, posee cierto regusto pop en lo visual y una imagen, la del indio motorizado, que bien podría ser un guiño a su seudónimo Zaldieroa/Caballo Loco. También merece la pena destacar el impecable trabajo del diseñador Javi López Altuna (1955) en Ganbara(tik) (Elkar, 1989) del grupo Ganbara, los de Javier Beristain en Joxemai beltza (Oihuka, 1989) de Jotakie e Hiru aeroplano (Oihuka, 1990) de Delirium Tremens, así como el del ilustrador e historietista David Lapeña Herrero (1970), creador la portada de Brigadistak Sound System (Esan Ozenki, 1999) de Fermín Muguruza, un trabajo en el que demuestra su habilidad como historietista y caricaturista.

Formado en el ámbito de las bellas artes y del diseño, el trabajo de Iñigo Ordozgoiti (1963) atiende de manera equilibrada a aspectos tanto creativos como funcionales. Aunque en la actualidad desarrolla su faceta profesional desde su estudio bilbaíno La Tapadera Creaciones, Ordozgoiti posee una dilatada trayectoria como free lance, así como en diversas empresas relacionadas con la publicidad y la comunicación. Una parte importante de sus incursiones en proyectos discográficos datan de los años noventa y comienzos de los dos mil, y en ellas se aprecia una clara dicotomía visual. Por un lado, crea diseños en los que la fotografía tiene un peso visual importante, como ocurre en el epónimo de Alaitz eta Maider (Elkar, 1997), Auhen Sinfonikoa (Elkar, 1998) de Benito Lertxundi, Bulun bulunka (Elkar, 1999) de Olatz Zugasti o Kantuz sortu naiz eta (Elkar, 2001) de Erramun Martikorena.

Fig.52 – Iñigo Ordozgoiti
Portada del disco de Mikel Markez “Zertarako mugak jarri”, 1995
© Elkar, 1995
Eresbil G21-00189

Por otro, su considerable bagaje artístico le lleva a proponer diseños en los que predomina lo pictórico. Tal es el caso de la colorista carátula creada para Zertarako mugak jarri (Elkar, 1995) de Mikel Markez [fig.52], la de marcado carácter expresionista de Bizkaiko kopla zaharrak (Elkar, 1999) de Tapia eta Leturia eta Amuriza, así como varias de las diseñadas para los discos del grupo Gozategi, como Kalanbreak (Elkar, 1998) y Egunon (Elkar, 2000), trabajos que destacan por su efectividad y extrema sencillez.

Fig.53 – Susana Rico
Portada del disco de Ama Say “Ikusi ditut umeak kalean ametsak akatzen”, 1993
© Esan Ozenki, 1993
Eresbil G11-1398

La diseñadora y fotógrafa Susana Rico desarrolló una amplia producción en el campo del diseño de carátulas de discos durante los años noventa. En líneas generales, sus creaciones proponen universos visuales muy dispares entre sí, generados tanto por sus aportaciones y su gusto por la experimentación, como por las de los ilustradores y fotógrafos que colaboraron con ella en algunos trabajos. No es de extrañar, por tanto, que diseños como Ikusi ditut umeak kalean ametsak akatzen (Esan Ozenki, 1993) [fig.53] de Ama Say, con fotografías de Jesús Ángel Miranda, tengan tan poco que ver con otros como el epónimo de Lin Ton Taun (Esan Ozenki, 1993), con ilustración de Dani Aizpurua «Anestesia».

Citaremos como reflejo de su versatilidad y talento las carátulas de Lehertzeko garaia (Esan Ozenki, 1994) de BAP!!, Itsas zabalean (Elkar, 1995) de Ganbara o Lau eskutara (Elkar, 1995) de Julio Pereira & Kepa Junkera.

También resulta interesante el trabajo llevado a cabo en la misma década por el dibujante y diseñador de Burlada Iñaki Rosales (1968). Durante el tiempo en el que este creador autodidacta colaboró en proyectos de los sellos Oihuka y Elkar, concibió sus trabajos como proyectos de diseño integral fundamentados en las ideas que los grupos compartían con él. Sus propuestas son sencillas pero contundentes, pues defendía que la portada del disco era una herramienta esencial de venta. Ajeno a cualquier estilo que pudiera encasillar su producción, destaca el vínculo con el cómic en sus diseños para Esaiek (Oihuka, 1995) de Ehun Kilo y Todo por el suelo (Oihuka/Elkar, 1995) de Leize. En Plantala (Oihuka/Elkar, 1995) de Potato [fig.54] recurrió a un registro pictórico colorista, tropical y naíf, muy acorde al imaginario sonoro de esta banda de reggae, en contraste con Euskal label (Oihuka/Elkar, 1996), divertida portada en la que el vocalista del grupo Sustraiak aparece retratado como un luchador de sumo.

Fig.54 – Iñaki Rosales
Portada del disco de Potato “Plantala”, 1995

Oihuka, 1995. © Elkar
Eresbil G21-01001

Fig.55 – Joseba Ponce
Portada del disco de Fermín Muguruza “FM 99.00 Dub Manifest”, 2000
© Esan Ozenki, 2000
Eresbil G21-LG-2000-SS-091

Probablemente más conocido en su faceta de músico integrante de los grupos Dut y Kuraia, Joseba Ponce (1974) ha llevado a cabo un interesante trabajo como diseñador gráfico en un número considerable de discos editados por Esan Ozenki, Elkar y Metak, entre otros. Su habilidad para experimentar con diversos lenguajes y referencias creativas queda patente desde sus primeros trabajos de mediados de los noventa hasta otros de factura mucho más reciente. De hecho, pese a lo prolífico de su trabajo, Ponce genera un imaginario único y extremadamente original para cada proyecto, pues pocos adivinarían que bajo el carácter desenfadado y tropical de Karpe Diem (Esan Ozenki, 1997) de Joxe Ripiau, el fino y extremadamente depurado diseño de Amodio eta gorrotozko kantak (1984-1998) (Esan Ozenki, 1998) de Fermín Muguruza o la elegancia de Lagunak, adiskideak… eta beste hainbat etsai (Esan Ozenki, 1999) de Xabier Montoia con fotografías de Galder Izagirre, se encuentra el mismo diseñador. También resultan especialmente llamativas la carátula de marcado gusto constructivista creada para FM 99.00 Dub Manifest (Esan Ozenki, 2000) de Fermín Muguruza [fig.55], músico con el que Joseba Ponce ha colaborado reiteradamente en su faceta de grafista, así como la de Piztu da piztia (Metak, 2005) del grupo Kuraia, formación en la que fue guitarrista y creador de las portadas de sus discos. Las imágenes de esta última bien podrían pasar por las de un cómic estadounidense de la serie Showcase de los años cincuenta si no fuera porque la lucha entre el monstruo gigante de la portada y los cazas que lo bombardean se desarrolla en pleno Donostia. Estos son solo algunos ejemplos que ponen de manifiesto la enorme versatilidad y calidad de este músico y diseñador.

La producción de la polifacética Garbiñe Ubeda (1967) en el campo del diseño de carátulas de discos se halla indefectiblemente ligada al grupo Bide Ertzean. De sus creaciones para esta banda destacan Zure minari (Gaztelupeko Hotsak, 1999), portada concebida como continuación de la del álbum epónimo publicado un año antes, y en la que se reproduce el motivo que fue adoptado como logo por el grupo. También sobresalen la depurada y poética carátula de Grisa (Gaztelupeko Hotsak, 2000), la de Maite out (Gaztelupeko Hotsak, 2002), así como la de Non dira (Gaztelupeko Hotsak, 2006) [fig.56], gran ejercicio de diseño con múltiples referencias simbólicas, en el que Ubeda mezcla la fotografía antigua con fragmentos de carteles de guerra.

Fig.56 – Garbiñe Ubeda
Portada del disco de Bide Ertzean “Non dira”, 2006
© Gaztelupeko Hotsak, 2006
Eresbil G21-LG-2006-SS-077

Los primeros trabajos profesionales del ilustrador y diseñador gráfico barcelonés Carles Closa, conocido como Txarly Brown (1967), datan de finales de los años ochenta. Aunque sus aportaciones en el campo del diseño abarcan un amplio registro, destaca especialmente su vínculo con la industria musical, nexo que prolonga al ámbito práctico en su faceta de discjockey. En líneas generales, sus carátulas de discos poseen cierto aire retro, fruto de la experimentación con lenguajes de los años cincuenta y sesenta, tal y como se aprecia en la explosión pop de Hondartzan (Metak, 2005) de Makala y W’ellington (Gatzelupeko Hotsak, 2013) de la Gasteiz Big Band, diseño este último en el que coquetea con la estética de referentes de la talla de Milton Glaser o Paul Davis. En otros ejemplos como Hotsak Dantzan 2 (Gaztelupeko Hotsak, 2010) de Jimmy Bidaurreta y varios de los creados para la Gasteiz Big Band, parece mirar al diseño discográfico ilustrado de los años cincuenta de figuras como Alex Steinweiss y Jim Flora.

Fig.57 – Juanma Aramendi y Unai Arana
Portada del disco de Ken Zazpi “Ortzemugak begietan”, 1995
Oihuka, 1995. © Elkar
Eresbil G21-LG-2010-SS-063

El volumen de trabajo llevado a cabo por Juanma Aramendi en el departamento de diseño de la editorial Elkar resulta sencillamente apabullante. Además de la ingente cantidad de libros en los que ha intervenido como diseñador, sus carátulas de discos se cuentan por centenares y son un reflejo de la versatilidad de este ecléctico grafista. Ya desde algunos ejemplos de los años noventa se aprecia su mirada efectiva, funcional y poética que tiende a reclamar nuestra atención y a subrayar la importancia de la imagen como elemento de conexión entre el producto discográfico y el potencial consumidor. Las carátulas de discos como Herriaren taupada (Oihuka, 1997) y Odola Sutan (Elkar, 2005), ambos del grupo Idi Bihotz, no solo son significativas de la evolución del trabajo de este diseñador en apenas una década, sino que también nos presentan a un Aramendi ilustrador y diseñador que acude a la fotografía como medio de uso habitual. De hecho, gran parte de la esencia poética de sus trabajos deriva de las imágenes de fotógrafos como Ander Guillenea o Juantxo Egaña, talentos que unidos al del diseñador generan estampas de una gran elegancia y sofisticación. Tal es el caso de la carátula del disco epónimo de Kukuma (Elkar, 2004), de Haize Oihalak (Elkar, 2005) de Pello Ramírez y Encore (Elkar, 2005) de Gonzalo Tejada, con fotos de Guillenea, así como la de Georges Brassens Kantari (Elkar, 2001) de Anje Duhalde, con imágenes de Egaña. Aunque la monumental producción de Aramendi nos impide hacer un recorrido sistemático por su producción, no nos resistiremos a citar por su delicadeza y originalidad algunos ejemplos como Antologia (Elkar, 2006) de Lourdes Iriondo, llevada a cabo con fotografías del archivo de la revista Argia, la finísima Ortzemugak begietan (Elkar, 2010) de Ken Zazpi [fig.57], diseñada en colaboración con Unai Arana y fotos de Kontraluz Studio, así como la Black is beltza (Elkar, 2018) de Raúl Refree y Fermin Muguruza, concebida como una viñeta de cómic en blanco y negro.

La doble faceta de músico y diseñador de Eneko Etxeandia (1977) ha dado como resultado productos muy interesantes tanto en lo musical como en lo visual. Miembro de las bandas Nuevo Catecismo Católico, Teen Dogs o Lie Detectors, ha diseñado las carátulas de muchos de sus discos. Consciente de que la relación entre la música y la imagen ha sido fundamental en la historia del rock, frecuentemente toma como referencia la estética de las portadas de discos de décadas atrás y utiliza recursos como el silueteado de fotografías que colorea con anilinas, al tiempo que pone un especial esmero en la tipografía que trabaja y personaliza de manera concienzuda.

Fig.58 – Eneko Etxeandia
Portada del disco de Roy Loney and Señor No “Bottle of Wine”, 2007
© Gaztelupeko Hotsak, 2007
Eresbil G13-LG-2007-SS-001

Su método ha dado como resultado diseños con cierto regusto retro, apreciable en los creados para 1280 Euskal Hiria (Gor, 2007) de Captain Nemo y Bottle of Wine (Gaztelupeko Hotsak, 2007) de Roy Loney and Señor No [fig.58], entre otros.

Fig.59 – Iñaki Markinez
Portada del disco de Betagarri “Freaky Festa”, 2000
© Esan Ozenki, 2000
Eresbil G21-LG-2000-SS-103

Iñaki Marquínez lleva más de 20 años dedicado al diseño gráfico, primero bajo el alias “io grafix” y posteriormente en el estudio Cretatta de Gasteiz, junto a David Gotxikoa y Boris Recio. Durante todo este tiempo ha mantenido una estrecha relación con el mundo de la cultura en general y de la música en particular, tanto en su faceta de grafista como en la de DJ con el nombre de Cubo. Aunque ha trabajado áreas como la del diseño editorial o la identidad corporativa, el diseño gráfico relacionado con la música ocupa una parte importante de su producción, en forma de carteles, flyers y, por supuesto, carátulas de discos. Sus incursiones en este último campo han dejado ejemplos muy interesantes, que ponen de manifiesto su versatilidad.

A modo de breve recorrido, citaremos la inquietante portada de Degeneración X (Mil A Gritos Records, 1999) de Anarko, la embriaguez visual de Por supuestón! (Mil A Gritos Records, 2000) de Kaos Etiliko, 80/00 (Esan Ozenki, 1999) y Freaky Festa (Esan Ozenki, 2000) de Betagarri [fig.59], además de otros originales diseños realizados para los grupos Potato y Soziedad Alkoholika, entre otros.

Mel Mardaraz se formó en la Facultad de Bellas Artes de la UPV-EHU y comenzó su trayectoria como diseñadora gráfica a finales de los años noventa. Desde entonces ha desarrollado gran cantidad de trabajos en el ámbito editorial y de imagen corporativa, labores que en la actualidad compagina con su faceta docente como profesora de diseño. Asimismo, su relación con la música ha sido constante desde los inicios de su carrera profesional, pues ya en 1998 se encargó del diseño de la carátula de Badira hiru aste (Gaztelupeko Hotsak, 1998) de Mikel Urdangarin, artista con el que ha colaborado posteriormente en Espilue (Gaztelupeko Hotsak, 2000), con fotos de Juantxo Egaña, y Bar Puerto (Gaztelupeko Hotsak, 2001), disco de Urdangarin y Bingen Mendizabal basado en una historia de Kirmen Uribe.

Fig.60 – Mel Mardaraz
Portada del disco “Ehungarrenean hamaika: Lauaxeta 2005”, 2005
© Gaztelupeko Hotsak, 2005
Eresbil G21-LG-2005-SS-127

De entre sus numerosos proyectos citaremos, por su extremada finura y equilibrio entre lo creativo y lo funcional, los diseños para Agur intxorta maite (Gaztelupeko Hotsak, 2001) de Joseba Tapia, Heldu artean (Gaztelupeko Hotsak, 2002) de Mikel Urdangarin, Gorri isila (Gaztelupeko Hotsak, 2002) de Miren Aranburu Ensemble, con fotografía de Bea Zabalondo, Higakorra (Gaztelupeko Hotsak, 2005) de Arean, con ilustración de Maite Yurrebaso, así como la fina y original carátula de Ehungarrenean hamaika: Lauaxeta 2005 (Gaztelupeko Hotsak, 2005) [fig.60].

También el bilbaíno Ritxi Ostáriz es especialmente conocido por sus aportaciones en el campo del diseño musical y editorial, ámbito este último en el que ha conseguido prestigiosos galardones como el Laus de bronce por su trabajo en Musika Hizpide (2010). Poseedor de una producción muy variada, un somero recorrido por ella reflejaría que lleva más de una década diseñando carátulas de discos con imágenes de una extrema contemporaneidad y tintes minimalistas. Si bien muchas de ellas han sido creadas para sellos alemanes, nórdicos o anglosajones, merece la pena citar ejemplos más cercanos como su trabajo en La orquesta Jalamandruki (TX, 2009) de Josetxo Goia-Aribe.

Aunque en la actualidad el trabajo de Concetta Probanza (1969) se centra en ámbitos como la ilustración y la literatura, ha llevado a cabo interesantes incursiones en el campo del diseño de carátulas de discos. Formada en la Facultad de Bellas Artes de la UPV-EHU, concibe sus trabajos como creaciones globales en las que se ocupa tanto de las ilustraciones como de las labores de diseño. Carátulas como las ideadas para Zure begiek: bilduma 1988-2008 (Elkar, 2008) de Mikel Markez e Izar uxo (Elkar 2009) de Jexuxmai Lopetegi, así como para otros discos editados en el sello barcelonés Fresh Sound, dan fe de la factura artística de sus diseños en los que la ilustración juega un papel fundamental.

Fig.61 – Bunker Graphics
Portada del disco de Los Coronas & The Hi-risers “Hartzazu koktela hauekin…”, 2009
© Gaztelupeko Hotsak, 2009
Eresbil G12-LG-2009-SS-001

Rubén Suárez Sousa (1973) divide su trabajo entre sus dos grandes pasiones. Por un lado, la música como miembro de grupos como los High Sierras y Family Folks y, por otro, con su faceta como diseñador gráfico, en la que el mundo musical también tiene un gran peso. De hecho, en el año 2002 fundó en Vigo el estudio Bunker Graphics junto a los también diseñadores Paulo Pascual y Roberto Argüelles. De entre sus muchas influencias confiesa su especial querencia por el trabajo del psicodélico Rick Griffin, el colectivo Hipgnosis, Andy Warhol, Jim Flora o incluso los dibujos animados de Hanna-Barbera. La evocación a estas dos últimas está presente en muchas de las carátulas creadas para el sello Gaztelupeko Hotsak, tanto en Bunker Graphics como en su posterior trayectoria como free lance a partir de 2014. Aunque los discos en los que ha participado como diseñador son muy variados, muchos de ellos están asociados al mundo del blues y el jazz y, en lo tocante al diseño, son susceptibles de ser organizados en dos bloques. Por un lado, aquellos trabajos en los que Suárez se revela como un gran ilustrador y frecuentemente opta por un estilo dinámico y desenfadado que recuerda al packaging discográfico de los años cincuenta. En ellos se aprecia claramente la influencia de los citados Jim Flora y Hanna-Barbera. De este bloque resultan especialmente significativas las carátulas pertenecientes a los discos Hartzazu koktela hauekin… (Gaztelupeko Hotsak, 2009) de Los Coronas & The Hi-risers [fig.61], It’s fiesta time (Gaztelupeko Hotsak, 2010) de Los Reyes del K.O., Ildoia landuz (Gaztelupeko Hotsak, 2016) y Txertaketa (Gaztelupeko Hotsak, 2018), ambas de los Broken Brothers Brass Band, así como 1290 Prospect Place (Gaztelupeko Hotsak, 2017) de The Machetazo.

Por otro, también resultan muy interesantes las propuestas en las que combina la imagen fotográfica y la tipografía, de tal manera que el resultado parece tener reminiscencias de las portadas de los años sesenta y setenta de prestigiosos sellos discográficos como Blue Note, Verve o ECM Records, tal y como se aprecia en Charlie Haden Songbook (Gaztelupeko Hotsak, 2016) de Marcelo Escrich Silent Trio, con fotografía de Jaime Estefanía.

El perfil profesional de Ángel López de Luzuriaga “Ardiluzu” posee una rara mezcla en la que cohabitan sus estudios en el ámbito de la economía y el marketing, con su interés por el mundo del arte, la literatura y la música. La habilidad para captar la esencia de una idea o mensaje y plasmarla mediante trazos básicos y efectivos es uno de los signos que definen el trabajo de este diseñador gráfico. En las carátulas creadas para los discos de varias ediciones del programa Ondas de Jazz en la Ciudad, que se celebra en Vitoria-Gasteiz, hace suya la frase “menos es más”, pues en algunas de ellas es capaz de aprehender y evidenciar la naturaleza de grandes nombres de la música del siglo XX con un dibujo tan sencillo como potente, tal y como ocurre en las portadas de In memory of Chet Baker (Gaztelupeko Hotsak, 2014) y Homenaje a Joni Mitchell (Gaztelupeko Hotsak, 2015) [fig.62].

Fig.62 – Ángel López de Luzuriaga “Ardiluzu”
Portada del disco “Homenaje a Joni Mitchell”, 2015
© Gaztelupeko Hotsak, 2015
Eresbil G21-LG-2015-SS-075

Fig.63 – David Gotxikoa “Gotxi”
Portada del disco de Bender vs.Flexo “Botox Party”, 2008
© Gaztelupeko Hotsak, 2008
Eresbil G21-LG-2008-SS-076

Formado en el ámbito de las bellas artes, David Gotxikoa “Gotxi” es poseedor de una dilatada trayectoria como director y cofundador de los estudios vitorianos de diseño Creatta y Azul Prusia, desde los que ha diseñado un número importante de carátulas de discos. Su afán por aportar un valor visual y creativo adicional le ha llevado a idear propuestas que se adaptan a cada disco y que tienen muy en cuenta su esencia musical. La poesía, la elegancia y la sofisticación son características que acompañan a muchos de sus proyectos para discos de jazz como Lorategi hibridoan (Gaztelupeko Hotsak, 2005) de Miren Aranburu Ensemble, Gorraizea (Gaztelupeko Hotsak, 2017) de Xabier Montoia y My Private Circus (Gaztelupeko Hotsak, 2012) de Chris Casey, pieza esta última que posee reminiscencias que recuerdan a las portadas de Burt Goldbatt de los años cincuenta. En Live in the Basque Country (Gaztelupeko Hotsak, 2009) de Mingo Balaguer & Félix Slim y Be (Gaztelupeko Hotsak, 2011) de Nevermind Trio, saca a relucir su faceta de ilustrador influenciado por el cómic, mientras que en otras carátulas, como Botox Party (Gaztelupeko Hotsak, 2008) de Bender vs Flexo [fig.63] y Here We Are Now, Entertain Us (Gaztelupeko Hotsak, 2010) de Nevermind People juega con el dibujo, el collage y la tipografía con el fin de conseguir imágenes tan sugerentes como acordes al producto musical al que ilustran y acompañan. Por si fuera poco, algunas también destilan cierto gusto retro que podríamos asociar con los trabajos de diseñadores como Reid Miles para el sello Blue Note, tal y como se aprecia, por ejemplo, en Organiks (Gaztelupeko Hotsak, 2009).

El dibujante y diseñador gráfico pamplonés Joseba Beramandi “Exprai” (1973) ha trabajado en múltiples medios que abarcan desde los fanzines a la ilustración en prensa, en revistas y libros. Su gusto por la experimentación le ha llevado a realizar obras de estilos muy dispares, razón por la que el sentido del humor y habilidad para la caricatura presentes en sus dibujos para diarios y revistas poco tienen que ver con los encargos que desempeña como diseñador gráfico en la agencia Cabinet. Así, su trabajo en el ámbito discográfico transita entre el depurado diseño de la carátula de 1997-2002 (Gor, 2006) de Skalariak, el cuidadísimo diseño exterior y un interior repleto de ilustraciones de 13 balas (Baga-Biga musika ideiak, 2016) del grupo Vendetta [fig.64] y el bello y original Galtzen ikasteko metodoa (Gor, 2017) de Balerdi Balerdi, concebido como un dibujo imposible que se refleja en forma de sombra tanto en la pared como en el suelo.

Fig.64 – Joseba Beramandi “Exprai”
Portada del disco de Vendetta “13 balas”, 2016
© Baga-Biga, 2016
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El trabajo de Paco Castro como diseñador se halla fuertemente ligado a la cultura y a la imagen de eventos como el BAD (Bilbao Antzerkia eta Dantza), el FANT o el Bilboko Kalealdia. Aunque sus trabajos como diseñador de carátulas no son muy numerosos, citaremos las creadas para los discos Beldurrik Ez! (Baga-Biga, 2015) de E.T.S. (En Tol Sarmiento), Dantzan (Baga-Biga, 2015) y Benefic (Baga-Biga, 2016) de Korrontzi. Todas ellas poseen un concepto de diseño integral en el que el interior está tan cuidado como el exterior.

Fig.65 – Nestor Urdanpilleta
Portada del disco de los Governors “Morphinapolis”, 2013
© Baga-Biga, 2013
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El nexo del zarauztarra Nestor Urdanpilleta (1974) con el mundo de la música, le vino dado en primer lugar por su pertenencia al grupo Eraso!, del que fue guitarrista. De hecho, los discos de esta banda no solo fueron un soporte en el que experimentar y poner en práctica lo aprendido como diseñador en Donostia, sino también el lugar en el que aplicar su particular manera de concebir las portadas. Además, su faceta de músico le permitió compartir escenario con grupos que le confiaron el diseño de las carátulas de sus discos, así como otros elementos de merchandising, razón por la que en su producción hallamos nombres de grupos como Soziedad Alkoholika, Eraso!, Surfin Kaos, Governors y Estigia, entre otros.

Sus carátulas, concebidas como una especie de espejo del contenido musical del disco, se basan en imágenes sencillas pero visualmente contundentes. Esta filosofía queda patente en múltiples ejemplos, desde Erantzunik Gabe (Mil A Gritos Recods, 1999) hasta Ez gara inoiz hilko (2012) de Eraso!, pasando por otras propuestas muy notables como Bizzionbizzi (Elkar, 2005) de Surfin Kaos, Mala sangre (2008) de Soziedad Alkoholika, así como Frenetikodrome (Elkar, 2010) y Morphinapolis (Baga-Biga, 2013) de los Governors [fig.65].

El extraordinario talento de la violinista Maite Larburu (1979) le ha llevado no solo a tocar en el circuito centroeuropeo de música antigua, sino también a experimentar en el campo del folk, el pop o el blues, como integrante del dúo Neighbor junto al contrabajista y viola-gambista Josh Cheatham. Además de su destreza como instrumentista, compositora y vocalista, Larburu es la autora de las carátulas de Hau (Gaztelupeko Hotsak, 2016) y Ura patrikan (Gaztelupeko Hotsak, 2013) de Neighbor, trabajos que ponen de manifiesto que su talento y sensibilidad van mucho más allá de lo estrictamente musical.

También el alavés Ángel Rockaina (Ángel Hellan) simultanea su trabajo como diseñador gráfico con su otra gran pasión, el rock and roll. Desde que en 1998 comenzara su carrera profesional, ha pasado por diferentes estudios y agencias del País Vasco, si bien en la actualidad ejerce su profesión como free lance. Muchas de sus carátulas de discos para bandas como Soziedad Alkohólika, Segismundo Toxicómano, Gatillazo y Disturbio muestran en su portada imágenes de gran potencia, con una curiosa mezcla de violencia y gusto por el contraste enfático, que tiende a combinar con una meticulosa concepción del diseño de conjunto.

Fig.66 – Ángel Rockaina
Portada del disco de Disturbio “Daños y perjuicios”, 2011
© Baga-Biga, 2011
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De entre su variada producción, merece la pena citar la creada para Compila-Acción (1991-2006) (Mil A Gritos Records, 2006) de Soziedad Alkoholika, cuya portada industrial esconde un cuidado diseño interior en el que, además de las letras de las canciones, se lleva a cabo un recorrido por las portadas de otros discos de la banda, Daños y perjuicios (Baga-Biga, 2011) de Disturbio [fig.66], cuyo concepto parece beber de clásicos como Philippe Huart y Pearl Cholley, así como la refinada Alfa y Omega (Baga-Biga, 2012) de Gobeo Bay.

Fig.67 – Carlos Undergroove
Portada del disco de Kaotiko “Reacciona!!”, 2010
© Baga-Biga, 2010
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Carlos Undergroove concibe su trabajo como un acto de implicación social, como una especie de guerrilla gráfica en la que ejerce un papel comprometido. De ahí que únicamente se embarque en proyectos acordes con su filosofía y que propicien su participación activa. No es de extrañar, por tanto, que entre sus principales influencias se hallen el graffiti, el arte urbano, los carteles callejeros de la Euskadi de los años ochenta, además de otras fuentes relacionadas con el diseño gráfico musical, como muchas de las portadas de los discos del sello Esan Ozenki o las que Manolo Gil llevó a cabo para grupos como Barricada y Kortatu.

De formación autodidacta, concibe su trabajo como un apoyo visual acorde al contenido de la música y de las ideas que transmiten las letras, máxima que pone en práctica tanto en sus conocidas carátulas de discos de Fermin Muguruza, con el que comenzó a colaborar a comienzos de la década del 2000, como en las de muchos otros grupos. Son significativas de su producción las creadas para varios discos de los alaveses Kaotiko, como Reacciona!! [fig.67], X y E.H. Calling (Baga-Biga, 2010, 2011 y 2013), los titulados Hegalak astinduz y Hesiak (Baga-Biga, 2014 y 2016) del grupo navarro Hesian, además de sus diseños para otras bandas como los bilbaínos Rat-Zinger y los Revolutionary Brothers; proyectos todos ellos con una fuerte esencia activista, tanto en lo musical como en lo gráfico.

El bilbaíno Igor Uriarte es el alma mater de Thezzign, estudio de diseño gráfico nacido en 2008 y especializado en campos como la identidad visual corporativa y el packaging. Sus trabajos poseen un perfecto equilibrio entre lo creativo y lo funcional, generando propuestas originales y de una extremada elegancia y pulcritud visual. Su buen hacer en el campo del diseño de carátulas de discos se aprecia en Ilun (Baga-Biga, 2008) del grupo Soilik, así como los de los Travellin’ Brothers titulados Red, Hot and Blue (Gaztelupeko Hotsak, 2009), Big Band (Gaztelupeko Hotsak, 2012) [fig.68] y Magnolia Route (Gaztelupeko Hotsak, 2014).

Fig.68 – Igor Uriarte – Thezzign
Portada del disco de Travellin’ Brothers “Big Band”, 2012
© Gaztelupeko Hotsak, 2012
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En estos dos últimos se aprecian ecos de grandes diseñadores de portadas de discos de mediados siglo XX como Burt Goldblatt o Jim Flora.

Fig.69 – Lur Merino
Portada del disco de Doctor Deseo “La fuerza de la fragilidad. Palabras ante el espejo”, 2018
© Baga-Biga, 2018
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Aunque el dibujante irundarra Joseba Larratxe “Josevixky” (1985) cursó estudios de arquitectura, se considera autodidacta en su faceta de dibujante de cómics. Este medio representa para él un vehículo perfecto con el que dar rienda suelta a su creatividad e imaginación. Por tanto, no es de extrañar que en las carátulas de Iglu bat basamortuan (Gaztelupeko Hotsak, 2012) de Lauroba y Galdemoduen Trilogia (Gaztelupeko Hotsak, 2017) de Mugaldekoak, recurra a una estética fácilmente identificable con el mundo de la historieta. De hecho, esta fusión entre la música y el cómic tuvo su reflejo en un interesante proyecto colectivo titulado KKLRD que vio la luz en 2012.

El trabajo del ilustrador y arquitecto Xabier Sagasta Lacalle, posee una potencia y emotividad fuera de lo común. Con un estilo que parece hundir sus raíces en la tradición de grandes dibujantes como Gustave Doré, John Bauer o William Russell Flint, crea imágenes llenas de poesía que han servido para ilustrar discos como Amaieratik hasi (Elkar, 2013) de Izaki Gardenak, diseño con claras reminiscencias modernistas, Instroak vol. 2 (Gaztelupeko Hotsak, 2013) de Joseba B. Lenoir, así como Galerak (Gaztelupeko Hotsak, 2019) de Alex Tello y Oihana Alkorta, auténtico alarde de imaginación y lirismo y probablemente uno de sus trabajos más redondos hasta el momento.

Rompiendo con la tónica de este apartado, citaremos al grupo Doctor Deseo por ser unas bandas que de manera continuada ha acudido a mujeres para la creación de muchas de las carátulas de sus discos. Así desde su epónimo Doctor Deseo (Hilargi Records, 1987), con diseño de María Jesús Pérez y Esther Torres, hasta sus publicaciones más recientes, son varias las diseñadoras cuyo talento ha modelado la imagen de los discos de esta banda. Por un lado, la bertsolari y habitual colaboradora Marta Ortiz es la autora de las carátulas de Rómpeme con mil caricias, cielo, rómpeme (Gor, 2004), Metamorfosis (básicamente lento) (Elkar, 2005) y Busco en tus labios: lo mejor del Deseo (Baga-Biga, 2014), piezas todas ellas en las que aflora el gusto por las puestas en escena teatrales tan características del grupo.

La carnalidad, el deseo, la provocación o la elegancia son algunas de las cualidades que transmiten los diseños de la durangotarra Lur Merino en las eróticas y provocativas carátulas de Cartografía imposible (Baga-Biga, 2010) y Maketoen iraultza (Baga-Biga, 2019), en las sencillas y estilosas de Al amanecer seguir soñando (Baga-Biga, 2012) e Igual y diferente, una mirada distinta (Baga-Biga, 2016), así como en la circense y cuidadísima edición de La fuerza de la fragilidad: Palabras ante el espejo (Baga-Biga, 2018) [fig.69]; trabajos todos ellos que denotan un extremo cuidado en áreas como la dirección de arte, el diseño o la maquetación.

Pese a las puntuales incursiones de Ibai Elortza en el campo del diseño de carátulas de discos, merece la pena destacar sus aportaciones en varios trabajos del grupo Sei Urte, como Bapatean y Ekiozu (Metak, 2003 y 2004), así como en Katuek bezala (Baga-Biga, 2009) de The Uski’s. Todos ellos destacan por el uso de variados lenguajes que van desde la fotografía experimental del primero a la impronta pictórico ilustrativa del segundo o las reminiscencias retro pop del tercero. También resultan interesantes los trabajos de Biktor Andueza para grupos como Berri Txarrak o Hemendik at!. Para los primeros diseñó las carátulas de Ikasten (Gor, 1999), Eskuak, Ukabilak (Gor, 2001) [fig.70] y Libre © (Gor, 2003) y para los segundos la de Etorkizuna (Gor, 2001), proyectos todos ellos en los que da fe de su talento creativo y versatilidad.  En una línea muy diferente, pero igualmente variada, Noé Galarza ha creado las portadas de varios discos del grupo de Gernika Gatibu, como Disko infernu (Baga-Biga, 2005), en la que da muestras de su agudeza como caricaturista, Laino guztien gainetik, sasi guztien azpitik (Baga-Biga, 2008) [fig.71], que supone una vuelta de tuerca tanto en lo visual como en lo conceptual con respecto al anterior, Zuzenean bisitzeko gogoa (Baga-Biga, 2010), planteado como retrato ilustrado de grupo y Zazpi kantoietan (Baga-Biga, 2012), que contrasta con todos los precedentes por su gran depuración formal.

Fig.71 – Noé Galarza
Portada del disco de Gatibu “Laino guztien gainetik, sasi guztien azpitik”, 2008
© Baga-Biga, 2008
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Fig.70 – Biktor Andueza
Portada del disco de Berri Txarrak “Eskuak, Ukabilak”, 2001
© Gor, 2001
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Si bien la poliédrica Buffi Agüero es conocida sobre todo por su faceta de batería, guitarra y vocalista en grupos como los Subsonics o Tiger! Tiger!, su talento también está detrás del diseño de las carátulas de algunos discos de estas y otras bandas. De hecho, ya en 1993 creó junto a Ronald Skutt la portada de Good Violence de los Subsonics, imagen en que llevó a cabo una interpretación en clave expresionista de la del LP de Frank Sinatra In the Wee Small Hours (1955). Esta querencia por participar en la imagen gráfica de sus grupos la ha mantenido en discos como The Kind of Goodnight (Gaztelupeko Hotsak, 2008) de Tiger! Tiger!, cuya conceptual portada y cuidado diseño interior se editó al menos en tres colores diferentes.

Desde hace más de 15 años, la diseñadora gráfica donostiarra Olatz Goikouria desarrolla una intensa labor en el campo del diseño editorial y corporativo. Sus trabajos para los discos Amorrua (Elkar, 2006) de Iker Goenaga y el epónimo de Sugan (Elkar, 2006), ponen de manifiesto que el diseño de carátulas ha sido una actividad que ha desarrollado de forma habitual en su carrera como profesional independiente. Sus propuestas van desde la extrema sencillez de Preguntatxo bat (Elkar, 2013) y Uhinak (Elkar, 2013) de EH Sukarra, con fotografía de Emma Laffitte, al diseño depurado con cierto aire retro de Txalaparta (Elkar, 2019) de Artze Anaiak, con imágenes de Roberto Masotti y Topa-K (Dj Makala & Korrontzi) (Elkar, 2019) de Topa-K.

A lo largo de su dilatada carrera profesional Lorea Uribe Etxebarria ha trabajado en diversos estudios de diseño gráfico de Donostia y Bilbao para finalmente establecerse por su cuenta y seguir diseñando portadas de libros, anuncios, catálogos, juegos, así como carátulas de discos. En lo visual, sus creaciones sobresalen por su sencillez e impronta poética, tal y como se aprecia en las carátulas de Nabil (Elkar, 2008) de Amaia Zubiria y Gau hotzenean ere (Elkar, 2010) de Olatz Zugasti, ambas con fotografías de Conny Beyreuther. En Zuei (Elkar, 2017) de Maider, opta por un registro más fresco y pop, efecto al que contribuyen tanto la fotografía de Kepa González como las tipografías utilizadas. Asimismo, sobresale por su cuidada edición en formato libro el disco colectivo Züberoako kantariak = Les chanteurs de la Soule (Elkar, 2019).

Fig.72 – Eider Corral Portada del disco de Eñaut Elorrieta “Irteera argiak”, 2019 © Elkar, 2019 Eresbil G21-LG-2019-SS-011

La pulcritud y elegancia de los trabajos de la diseñadora gráfica y directora de arte Eider Corral también se refleja en algunas carátulas de discos de edición reciente. Formada en Ciencias de la Comunicación en la UPV-EHU y en diseño en la escuela EINA de Barcelona, donde se especializó en tipografía, su producción abarca, entre otras áreas, la elaboración de estrategias creativas en el ámbito cultural, la gestión de marcas y el diseño editorial. Tras su paso por diversos estudios se estableció como diseñadora independiente y comenzó una ya larga trayectoria que le ha llevado a trabajar para con sellos discográficos como Blue Note o Deutsche Grammophon y artistas como Christina Rosenvinge, Martirio, Sílvia Pérez Cruz, El Columpio Asesino, Ruper Ordorika o Eñaut Elorrieta.

En líneas generales, sus sugerentes trabajos son pequeños tesoros, que amplifican y convierten en físico el ya de por sí gran vínculo generado entre el producto musical y quien lo consume. Tal es el caso del diseño para la edición limitada en vinilo de 500 copias del disco Gaur hamar t’erdietan Kafe Antzokian (Kafe Antzokiko Soinuak, 2019) de Ruper Ordorika, así como el de Irteera argiak (Elkar, 2019) de Eñaut Elorrieta [fig.72].

Tal y como hemos puesto de manifiesto en este apartado, la fotografía ha sido un elemento fundamental en el quehacer de muchos diseñadores y diseñadoras de carátulas de discos. Por ello, además de los citados con anterioridad, resulta obligado reconocer las aportaciones de muchos otros profesionales de este medio cuyas instantáneas han jugado un papel fundamental en el diseño de la carátula. Tal es el caso del refinado trabajo de Sigfrido Koch (1936-1992), cuyas fotografías sirvieron para ilustrar las portadas de varios discos entre los años ochenta y noventa de Imanol y Pantxoa eta Peio, entre otros. También poseen un planteamiento eminentemente fotográfico las portadas diseñadas desde mediados de los años ochenta por el miembro del movimiento cultural “Ez dok Amairu” José María Zabala (1949). Su gusto por las puestas en escena teatrales, derivada de su faceta como fotógrafo y cineasta, se aprecia en muchas de las carátulas diseñadas para Imanol, Jean Bordaxar, Juan Mari Beltrán y Labrit. El navarro Xabi Otero (1953) ejerció de diseñador y fotógrafo de un número considerable de portadas creadas durante los años ochenta y noventa para Xabier Lete, Txomin Artola o el grupo Ganbara, entre otros, al igual que lo hiciera en fechas cercanas el baracaldés Agustín Albizu (1958) para contundentes grupos punk-rock como Zer bizio? y Yo soy Julio César.

Fig.73 – Gorka Salmerón
Portada del disco epónimo de “Gari”, 1995
© Elkar, 1995
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Fig.74 – Aitor Ortiz / Nemonica (d.)
Portada del disco de Kepa Junkera “Hiri”, 2006
© Elkar, 2006
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También destaca la participación del fotógrafo de Errenteria José Ángel Areta Goñi “Juxe” (1968) en algunos discos de Muga, Petti, Surfing Kaos o Roy Loney, así como la del donostiarra Juantxo Egaña (1961), gran profesional que ha abordado múltiples campos como fotógrafo y cuyas imágenes han formado parte del diseño de carátulas de discos de Ken Zazpi, Imuntzo eta Beloki y Oskorri, entre otros. Asimismo, merecen una mención especial los trabajos del gipuzcoano Gorka Salmerón (1969) en las portadas del álbum epónimo de Gari (Elkar, 1995) [fig.73] y en la de Motx (TX, 1997), así como los del bilbaíno Aitor Ortiz (1971), cuya lente y sensibilidad artística se aúnan para otorgar un plus al diseño final, tal y como ocurre en Auhen Sinfonikoa (Elkar, 1998) de Benito Lertxundi, Bulun Bulunka (Elkar, 1999) de Olatz Zugasti e Hiri (Elkar, 2006) de Kepa Junkera [fig.74].

A modo de gran miscelánea, y como colofón de este apartado, también merece la pena citar los trabajos realizados desde algunos estudios de diseño gráfico, así como las incursiones puntuales en la producción de carátulas de algunos creadores y creadoras. El estudio de diseño y comunicación visual Alambre Estudio de Donostia fue fundado finales de la década de los noventa y, dentro de su variada clientela, estuvo el sello donostiarra especializado en música clásica NB (Nicolás Basarrate). Le Basque (NB, 2007) del Ensemble Diatessaron y Priez pour paix (NB, 2007) de Aita Donostia son dos de las numerosas creaciones que llevaron a cabo para esta discográfica entre 2005 y 2010, trabajos que en conjunto destacan por su finura, pulcritud y modernidad.

Fig.75 – Metart
Portada del disco de Fermin Muguruza “In-komunikazioa”, 2002
© Metak, 2002
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También resulta muy interesante la labor realizada desde Metart para muchos de los discos publicados por el sello Metak durante sus cinco años de andadura entre 2001 y 2006. La extremada calidad del diseño de muchas de sus carátulas, dificulta la elección de ejemplos sin generar agravios comparativos, pero puestos a elegir citaremos las creadas para Gaizki esanak… (Metak, 2002) de Sen, In-komunikazioa (Metak, 2002) de Fermin Muguruza [fig.75], Irun meets Bristol (Metak, 2003) de Fermin Muguruza, Photograma (Metak, 2004) de Zein? o Toulose (Metak, 2004) de Sagarroi, entre otros.

Por otro lado, también mencionaremos los diseños los ideados por la donostiarra Belén Ibarrola para Xabier Amurizaren kantari (IZ, 1990) de Anje Duhalde o el colorista Gozozale (IZ, 1992) de Minxoriak, así como los creados por Ainhoa Lukas desde finales de los noventa para las series infantiles Txanela Abestiak y Txanela Musica de Elkar. Son igualmente interesantes los de la dibujante Carmen Aguirrezábal, conocida sobre todo en su faceta de ilustradora de literatura infantil, autora de las estilizadas carátulas de Delitiae Musicae y Gerra eta bakea: kantak (Aus_art Records, 2003). Son asimismo notables el diseño de Olaf Ladousse (1967) para Amateur Universe (Elkar, 2006) de Atom Rhumba [fig.76], imagen que posee reminiscencias posmodernas que recuerdan al universo de la diseñadora estadounidense de April Greiman, el inspirado trabajo de Ainara Lasa (1975) para Deserriko kantak (Elkar, 2013) de Eñaut Elorrieta, con fotografía de Mendi Urruzuno, así como el creado en clave futurista por el ilustrador y director audiovisual Aitor Oñederra (1983) para el disco Ez da amaiera (Elkar, 2015) de Gari. Cierran esta miscelánea el trabajo con impronta constructivista de Ezequiel Hurtado para el disco Gure Mundua (Baga-Biga, 2014) de E.T.S. (En Tol sarmiento), los de Irune Izquierdo para Beti eta betiko (Elkar, 2017) de Joselu Anayak y Bizirik dauden eskuak (Elkar, 2019) de Agurtzane y Ion Elustondo, la poética portada creada por el navarro Iker Fernández para Aurri gara (Elkar, 2015) de Izaki Gardenak, así como los siempre sugerentes diseños del artista digital Kiko Alcázar para varios discos de Yogurinha Borova.

Fig.76 – Iker Fernández
Portada del disco de Izaki Gardenak “Aurri gara”, 2015
© Elkar, 2015
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